El 9 de julio de 1853, a poco más de un mes de la sanción de nuestra Carta Magna, Fray Mamerto Esquiú (franciscano, obispo y “Orador de la Constitución”), frente a los cuestionamientos de los sectores católicos más tradicionales, señaló en la Iglesia Matriz de Catamarca:
¡Argentinos!: es por esto, que al encontraros en la solemne situación de un pueblo que se incorpora, que se pone de pie, para entrar dignamente en el gran cuadro de las naciones, la religión os felicita, y como ministro suyo os vengo a saludar en el día más grande y célebre con el doble grandor de lo pasado y de lo presente, en el día que se reúne la majestad del tiempo con el halago de las esperanzas.
El papa Francisco dispuso su beatificación para el 13 de marzo de 2021 en Catamarca.